La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao (ACMB) ha celebrado en la biblioteca Bidebarrieta de Bilbao, su acto institucional de clausura de su curso académico 2023-2024. Se trata de su 129.ª edición. En el acto se nombraron 23 nuevos académicos, se presentaron cuatro nuevos presidentes de sección, se reconoció a 20 académicos de honor y se impartieron distinciones de honor a María Luisa Franco y Eduardo Areitio (†) (Medicina), Ángela Angoitia (Farmacia), Mercedes Beotegui (Dentistas), Juan Marco (Veterinaria) y Arkaitz Carracedo (Biología).
El acto fue conducido por Adrián Aginagalde, colaborador de la sección de Salud Pública de la Academia y contó con la presidencia de Agurtzane Ortiz, presidenta de la ACMB. Junto a ella, además de los miembros de la Junta de Gobierno de la Academia, estuvieron Gotzone Sagardui, consejera de Salud del Gobierno Vasco y Álvaro Pérez, concejal del Área de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao.
Estuvieron presentes diversas personalidades de la sociedad y la sanidad vascas, entre los que se puede citar a Nerea Urien, viceconsejera de Administración y Financiación Sanitarias; Mikel Sánchez, director de Planificación, Ordenación y Evaluación Sanitaria del departamento de Salud; Víctor Bustamante, director de Asistencia Sanitaria; Ana Collía, directora de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao; Mercè Balcells, de la Academia de Ciencias Médicas y de la Salud de Cataluña y Baleares; Blanca Condomines, de la Fundación Instituto Interuniversitario InterAc Salut; Nuria Ruiz, Rodrigo García, de la Universidad de Deusto; Isabel López Abadía, de la Universidad del País Vasco; y Alejandra Gil, de Osakidetza.
También asistieron Verónica Tíscar, presidenta de la Academia de Ciencias de Enfermería de Bizkaia; María José García Etxaniz e Ignacio González, presidenta y secretario del Colegio de Enfermería de Bizkaia; Unai Pequeño, presidente del Colegio de Logopedas del País Vasco; Isabel Tejada, presidenta del Colegio de Biólogos de Euskadi; Cosme Naveda, presidente del Colegio de Médicos de Bizkaia; Álvaro Díaz, presidente del Colegio de Podólogos del País Vasco; José Triviño, tesorero del Colegio de Veterinarios de Bizkaia; Juan Uriarte, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Bizkaia; Ainhoa Eguren, gerente del Colegio de Psicología de Bizkaia; Itziar Arteagoitia, vocal del Colegio de Dentistas de Bizkaia; Iban Arrien, presidente del Colegio de Fisioterapeutas del País Vasco; y Manuel Sánchez Moronta, del Colegio Oficial de Graduados en Ingeniería e Ingenieros Técnicos Industriales de Bizkaia.
También asistieron Enrique Ordieres, presidente de Cinfa; Iker Martín Pesado, presidente de la Asociación Vasca para la Calidad Asistencial (AKEB) y representantes del Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ), Quirónsalud, Faes Farma, Asisa, Cruz Roja, Contra el Cáncer Bizkaia, Asociación de Esclerosis Lateral Amiotrófica de Bizkaia (ADELA), Asociación Nacional de Amputados (ANDADE) y Pausoz Pauso (Apoyo a Pacientes Oncohematológicos).
Durante el acto también hubo tiempo para disfrutar de una breve actuación musical a cargo de Teresa Marcos Delgado y Eneko Fernández Cabezón, de la orquesta de la Universidad del País Vasco, que interpretaron al violonchelo obras de Domenico Gabrielli y Antonio Vivaldi.
Nuevos académicos
Cada año, el momento elegido por la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao para dar la bienvenida a los nuevos miembros de esta entidad centenaria es el acto institucional de clausura del curso académico. En concreto, este año un total de 23 profesionales de las distintas ciencias de la salud han sido admitidos y han obtenido su condición de académicos. Sus nombres son: Lore Ajuria, Irati Alzola, Sara Arce, Nancy Rosalía Bertado, Aurora Bilbao, Andrea Cardiel, Teresa M.ª Díaz, Celia Echarte, Jon Fernández, Luca Fanelli, Ruth Figueroa, Blanca Azucena Gil, Asier Gonçalves, Javier Guinea, Arkaitz Iza, José Manuel Martínez, Norberto Mascaró, Ainara Merino, Álvaro José Montiel, María Olaso, Eider Sanz, Jon Urruticoechea y Olatz Vergniory.
Durante el acto, se presentó la nueva sección de la Academia dedicada a la Innovación, que tiene a su frente al profesor Agustín Martínez Ibargüen. También se hicieron públicos los nombres de tres relevos en las presidencias de sección de la ACMB: Vicente Portugal es el nuevo presidente de la sección de Cirugía General y Laparoscópica; Roberto Nuño, de la sección de Economía de la Salud; y Josefa Ferreiro, de Oncología Médica.
Académicos de honor tras más de 40 años siendo miembros de la ACMB
Avanzando en el programa del curso académico, 20 miembros fueron homenajeados como académicos de honor por cumplir cuarenta años en la Academia. Sus nombres son: Julián Aguirrezabal, M.ª Teresa Bahíllo, Julián Bajo, José Ramón Barceló, Elisardo Bilbao, M.ª Teresa Conde, Borja Giménez, Pedro Miguel Lizarraga, M.ª Fátima Mendoza, César Merino, Pablo Enrique Muñoz, Antonio del Olmo, Jenaro Oraá, Javier Ortiz, Arantza Pérez, J. Ricardo Rodrigo, Fco. Javier Santamaría, Josune Villegas, Jon Zabalegui y Zuriñe Zubero.
Distinciones de honor
El acto de clausura del curso de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao finalizó con el acto de entrega de las distinciones de honor, que fueron otorgadas por Agurtzane Ortiz y las autoridades presentes que intervinieron en la apertura, Gotzone Sagardui y Álvaro Pérez, junto con Elena Urien.
Recibieron distinciones de honor en el ámbito de la Medicina María Luisa Franco, cuya laudatio fue leída por Ricardo Franco Vicario, expresidente de la ACMB, y Eduardo Areitio Cebrecos quien falleció el pasado mayo, siendo miembro de la Junta de Gobierno de la ACMB desde hace numerosos años y al que se le recordó especialmente en el evento, en una laudatio pronunciada por el Prof. Juan José Zarranz, expresidente de la Academia.
El resto de profesionales que recibieron la distinción de honor fueron Ángela Angoitia en Farmacia, siendo leída su laudatio por Juan Uriarte, vicepresidente de Farmacia de la ACMB; Mercedes Beotegui (Dentistas), cuya laudatio fue presentada públicamente por Ana María García Arazosa, vicepresidenta de Dentistas de la ACMB; Juan Marco, en Veterinaria, cuya laudatio corrió a cargo de Ramón A Juste, vicepresidente de Veterinaria de la ACMB; y Arkaitz Carracedo, en Biología, cuyos méritos fueron narrados por Isabel Tejada, vicepresidenta de Biología de la ACMB.
La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao y el Colegio de Psicología de Bizkaia han celebrado recientemente en Bilbao una actividad formativa abierta a profesionales y público en general bajo el tema ‘Prevención de la salud mental infanto-juvenil: del nacimiento a las primeras relaciones’.
La misma, que se celebró en el Salón Areilza del Colegio de Médicos de Bizkaia, tuvo como ponentes a Maite Ramírez, psiquiatra infantil y responsable del programa de Hospital de Día de Adolescentes de la Organización Sanitaria Integrada (OSI) Barrualde-Galdakao de Osakidetza-Servicio Vasco de Salud (O-SVS); Elsa Duña, doctora en Psicología, psicóloga clínica y psicoanalista; y Consuelo Panera, psicóloga clínica de la Unidad Terapéutico-Educativa de Ortuella, perteneciente a la Red de Salud Mental de Bizkaia.
La cita fue moderada por Leire Erkoreka, jefa de servicio de Psiquiatría de la OSI Barrualde-Galdakao, profesora de Psiquiatría de la Universidad del País Vasco y miembro del grupo coordinador de la Sección de Psiquiatría y Salud Mental de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao. La bienvenida a las ponentes y al público en general corrió a cargo de Begoña Rueda, decana del Colegio de Psicología de Bizkaia, y Agurtzane Ortiz, presidenta de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao.
Los primeros meses tras el parto, un periodo crítico
La psiquiatra Maite Ramírez abrió el turno de las intervenciones con la ponencia ‘El apego en la infancia y su relación con la futura salud mental’. Según manifestó, «todas las etapas de la vida son importantes, pero algunas lo son más, ya que en ellas el cerebro cambia más rápidamente, por eso las llamamos ‘períodos críticos del desarrollo’».
Tal y como explicó, los primeros meses tras el parto «constituyen uno de esos periodos críticos y, por tanto, la calidad de los cuidados que recibe el bebé, tanto de sus necesidades físicas como emocionales, va a ser un condicionante de su futura salud mental».
Un vínculo seguro del menor con sus cuidadores ayudará al menor en el futuro «a regular sus emociones y a relacionarse mejor y será un factor protector que reducirá la posibilidad de que sufra trastornos mentales. Por ese motivo, tanto los servicios públicos como la sociedad en su conjunto deberían concienciarse de la importancia de apoyar a las familias en la crianza», reclamó.
Educar en la tolerancia al fracaso
A continuación tomó la palabra la psicóloga Elsa Duña, que abordó el tema ‘Cómo ser padres sin morir en el intento’. Durante su charla puso de manifiesto que «la función parental nada tiene que ver con el hecho de ser madre o padre, sino con la capacidad tanto de la mujer como del hombre, para desempeñar la función materna y paterna en base a las diferentes necesidades del hijo».
Para la experta, todo encuentro padres-hijo «es una experiencia relacional que les confrontará a ambas partes con una sensación de extrañeza, consecuencia de la alteridad necesaria e ineludible y que siempre conlleva emociones disruptivas para todos». Además, hizo referencia a las situaciones en las que los padres proyectan en los hijos sus dificultades, algo que ocasiona «lo equivalente a una intoxicación psíquica en el bebé de elementos ajenos a él. Elementos tóxicos que necesitará expulsar, pudiendo dar lugar a disfunciones corporales y emocionales».
Elsa Duña concluyó señalando que la confianza interna «se genera por identificación con un adulto suficientemente cuidador, que soporta también desilusionar al hijo, ayudándole con ello en su desarrollo psíquico y que conlleva una ganancia paulatina en la capacidad para hacer frente a la insatisfacción, a la imposibilidad de realizar todos los deseos y al dolor emocional».
Las experiencias relacionales entre los padres y el bebé son la base de la salud
La última de las tres ponentes, Consuelo Panera, tuvo como título de su ponencia ‘Salud mental en la primera infancia; una mirada preventiva desde la asistencia sanitaria pública’. Durante su intervención, recordó que las experiencias relacionales entre el bebé y sus padres (entorno cuidador) «son la base tanto de la supervivencia, como del desarrollo afectivo y la salud mental».
La prevención en el ámbito de la salud mental de niños y adolescentes, para la psicoterapeuta, «debe centrarse en el periodo que va desde el embarazo hasta los 3 años. Cuidar las condiciones del desarrollo temprano previene o reduce la evolución hacia patologías de salud mental de niños y adolescentes», recalcó.
El cuidado del vínculo afectivo que se desarrolla entre el bebé y sus padres, promoviendo la confianza y el desarrollo de las funciones parentales, así como la detección de situaciones de riesgo, «es fundamental en las consultas de los profesionales que atienden estas etapas».
Así, para Consuelo Panera, «los profesionales de salud mental infanto-juvenil y los pediatras y enfermeras deben colaborar estrechamente para atender al menor en los momentos clave del desarrollo temprano. Y acompañar especialmente a familias con factores socioeconómicos y culturales de vulnerabilidad como la inmigración, evitando actitudes punitivas».
Salud mental durante la gestación
En cuanto a la moderadora, la psiquiatra Leire Erkoreka, destacó ante los presentes que, en un contexto de «creciente de preocupación social por el empeoramiento de la salud mental de los más jóvenes, además de incidir en la importancia de la prevención primaria de la salud mental infantil desde el nacimiento, no debiéramos olvidar que dicha prevención primaria debiera comenzar en la gestación».
Según afirmó, «existe una evidencia creciente sobre el impacto que tiene la patología ansioso-depresiva materna, durante el embarazo, en la futura salud física y mental del bebé que se está gestando, por lo que, siguiendo la senda de otros países, se debería reflexionar sobre la importancia de desarrollar programas de salud mental perinatal que, además de mejorar la salud de las madres, podrá potencialmente servir de herramienta de prevención primaria de la salud de sus hijos».
Por otro lado, Begoña Rueda, decana del Colegio de Psicología de Bizkaia, puso en valor la labor de estos profesionales. También destacó la importancia «del apego y su relación con la futura salud mental en la infancia, al igual que la de la mirada preventiva desde la asistencia sanitaria pública» en la salud mental de la primera infancia. La Decana se preguntó en qué medida las vivencias de cuidados de los primeros tiempos de la vida de un bebé afectan e influyen en las diferentes etapas de la vida.
Por último, Agurtzane Ortiz, presidenta de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao expuso a los asistentes que en los primeros años de vida «es fundamental crear un vínculo afectivo seguro entre los padres y el bebé, en un entorno estable, seguro y estimulante, esencial para su desarrollo cognitivo y emocional y que proporcione una base sólida para la salud mental de éste último. Por supuesto cuidando de la salud física y nutricional del bebé».
Igualmente, abogó por promover entornos saludables y concienciar sobre la importancia de la salud mental, así como la instauración de políticas y programas de apoyo.
La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao y el departamento de Empleo, Cohesión Social e Igualdad de la Diputación Foral de Bizkaia clausuraron ayer en los salones de la Sociedad Bilbaina las III Jornadas Mujer y Salud, que este año se centraron en la violencia machista.
Bajo el título ‘Modelos de intervención clínica según las fases del cambio. Conocer las necesidades de las mujeres según las diferentes etapas por las que pasan’, Izaskun Elortegi Kaiero, psiquiatra de la Red de Salud Mental de Bizkaia de Osakidetza y profesora de la Universidad del País Vasco, abrió el contenido previsto para esa tarde.
Tal y como explicó, el sistema sanitario «es fundamental en la detección y también en el acompañamiento» de las mujeres que sufren violencia machista; «es un lugar al que las mujeres acuden, en el que confían, y debemos asegurar que se sientan seguras y puedan hablar sin temor a ser juzgadas».
La experta señaló que cada mujer construye «su propia ruta, su particular camino de salida de la violencia, y nuestra labor es acompañar, apoyar y fomentar la autonomía, y debemos respetar sus valores y su propio proyecto de vida».
El modelo transteórico de cambio, para la psiquiatra, es una herramienta «muy práctica y útil» para las y los profesionales en este proceso de acompañamiento, ya que, según dijo, «es un modelo ya conocido y utilizado, que no resulta extraño para las y los profesionales de la salud. Este modelo sirve de guía para acompañar de manera eficaz a la mujer en su salida de la violencia, utilizando las herramientas más adecuadas en cada fase».
Izaskun Elortegi recalcó que «siempre» se debe insistir en la importancia de la formación en materia de violencia machista, «una formación transversal y en todos los niveles de atención sanitaria. Y no se trata sólo de adquirir conocimientos (qué hacer), sino también habilidades (cómo hacer) y actitudes (hacer)».
Ámbito ginecológico
La segunda ponente de la jornada, Amelia Valladolid Urdangaray, ginecóloga del servicio de Ginecología del Hospital Universitario Basurto, de Bilbao, y profesora igualmente de la Universidad del País Vasco, impartió la ponencia ‘Violencia sexual, implicaciones en la práctica de la nueva ley’. En ella, desgranó la implicación a nivel sanitario del cambio legislativo reciente: la Ley Orgánica 10/2022, de 6 de septiembre, de garantía integral de la libertad sexual.
Los cambios fundamentales expuestos por Amelia Valladolid se refieren a que la recogida de muestras biológicas y otras evidencias, no estará condicionada a la presentación de la denuncia. «En los casos en los que el juez o jueza de guardia o la fiscalía no ordene la intervención del médico o médica forense, dichas muestras y evidencias se recogerán por el centro sanitario».
La ginecóloga describió las actuaciones recomendadas en el ámbito sanitario que incluyen «la anamnesis y examen clínico, así como la toma de muestras de interés legal y para despistaje de infecciones de transmisión sexual (ITS), petición de analíticas, tratamiento de lesiones físicas y psíquicas, tratamiento preventivo de ITS, anticoncepción postcoital, seguimiento y atención social».
La moderación de las dos ponencias de la jornada estuvo bajo la responsabilidad de Maite Larrinaga Llaguno, enfermera del grupo de Violencia de Género de la Organización Sanitaria Integrada Bilbao-Basurto y secretaria de la Academia de Ciencias de Enfermería de Bizkaia.
Coordinación asistencial interniveles
La enfermera concluyó destacando «la necesidad de colaboración intersectorial a nivel de instituciones y organismos así como la coordinación asistencial interniveles para el acompañamiento de las mujeres y la ayuda en la toma de decisiones. Decisiones que, como profesionales, también debemos valorar en coherencia con la etapa de cambio en la que se encuentra la mujer. Como profesionales también es interesante ser capaces de ofrecer una red de soporte a través del mapa de recursos: entidades y asociaciones, así como recursos municipales, autonómicos, etcétera, que permitan una actuación realmente completa»
La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao y la Diputación Foral de Bizkaia inauguraron las III Jornadas Mujer y Salud, que este año se centran en la violencia machista. La actividad se desarrolla en los salones de la Sociedad Bilbaina (calle Navarra, 1, Bilbao), en horario de 18.30 a 20.00 horas.
En la inauguración intervinieron Teresa Laespada Martínez, diputada foral de Empleo, Cohesión Social e Igualdad de Bizkaia, y Agurtzane Ortiz Jauregi, presidenta de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao (ACMB/BMZA). También estuvieron presentes en la inauguración Vicente Reyes, subdelegado del Gobierno; Trinidad Vicente, directora foral de Igualdad del departamento de Empleo, Cohesión Social e Igualdad; y Juan Ignacio Goiria, presidente de la Sociedad Bilbaina.
Según afirmó Laespada durante la inauguración, «nos enfrentamos a una cuestión muy dura pero muy cierta, a la que no podemos dar la espalda. Hablamos de mujeres que sufren la violencia machista y para las que la atención médica debe ser un refugio que vele por su salud integral más allá de los síntomas que ellas relaten. Una atención médica que cure su cuerpo, pero que les ayude también a curar su vida, porque una cosa no puede ser sin la otra».
La Diputada Foral añadió que «esto no puede hacerse sin la debida formación y alerta del personal sanitario y sin los protocolos que ponen su mirada en la violencia machista».
Por su parte, Agurtzane Ortiz recordó que en Euskadi, «la lucha contra la violencia machista siempre ha tenido un enfoque prioritario». «En este marco, parece coherente la implicación de los servicios de salud en la implementación de protocolos de detección y atención a la violencia machista, así como la formación del personal médico en la identificación y manejo adecuado de los casos de violencia machista. En esta línea es importante remarcar las recientes Guía de Actuación para profesionales de la Salud ante la Violencia de Género y las Agresiones Sexuales en Euskadi, de Osakidetza, o el III Acuerdo lnterinstitucional para la Coordinación de la Atención a Víctimas de Violencia Machista contra las mujeres en la CAE, de 2023, entre otros».
Una vez acabada la presentación de las jornadas, tomó la palabra la moderadora de las dos primeras conferencias previstas, Ana Gorroñogoitia Iturbe, médica especialista en Medicina Familiar y Comunitaria y vocal de la junta directiva de la Academia, que presentó a los ponentes.
Marisol Díaz González, enfermera Familiar y Comunitaria y miembro del Grupo de Violencia y Género de Osakidetza, fue la primera en intervenir, con su ponencia ‘Actuación ante la violencia de género y las agresiones sexuales en Euskadi desde los y las profesionales sanitarios. Nuevos escenarios’.
«Tenemos que afrontar este problema de una forma integral y transversal, escuchando la voz de las mujeres víctimas y también sobrevivientes desde los ámbitos institucionales, y desde la salud, un área muy importante para detectar la existencia de casos», destacó.
Para la experta, «los y las profesionales nos tenemos que implicar desde todos los servicios hospitalarios y de atención primaria en la detección y asistencia a estas mujeres, pero también de personas dependientes a su cargo como son las hijas y los hijos. Una respuesta de calidad por parte de los servicios de salud frente a la violencia contra las mujeres y las niñas es crucial, no solo para garantizar que las víctimas y sobrevivientes tengan acceso al máximo nivel de salud alcanzable, sino también debido a que es probable que el personal sanitario sea el primer punto de contacto profesional para las mujeres que han sido objeto de violencia. Una adecuada prestación de servicios representa un elemento fundamental de cualquier sistema de salud, como se recoge desde la OMS».
A continuación, Federico Melgosa Latorre, médico adjunto del servicio de Urgencias del Hospital Alto Deba (Gipuzkoa), pronunció la charla ‘La importancia de los servicios de Urgencias en la detección de casos de violencia de género’. Según expuso, la violencia de género es «un problema reconocido a nivel mundial que precisa de un abordaje multidisciplinar y coordinado».
El experto señaló que dentro de esta acción se enmarcan los servicios de Urgencias, «donde se realizan casi el 50% de las identificaciones de casos y que, además de actuar como el resto de agentes en el ámbito sanitario en materia de prevención, identificación de casos de vulnerabilidad, provisión de las actuaciones básicas y garantía del seguimiento, se desarrollan actuaciones específicas dirigidas al tratamiento de las lesiones físicas y las agresiones sexuales».
El Dr. Melgosa manifestó que «el trabajo actual y futuro se debe enmarcar en la mejora de la detección de casos en el conjunto del ámbito sanitario» —ya que se conoce que los servicios de Urgencias detectan entre el 5 y el 15% del total de los existentes— «mediante una investigación y una formación que ayuden a ampliar el conocimiento y la concienciación de los profesionales sanitarios».
La asistencia a las III Jornadas Mujer y Salud es libre y gratuita si bien, para controlar el aforo, es necesario inscribirse previamente en la página web de la Academia (https://www.acmbilbao.org/), que también emite el evento en directo a través de internet.
La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao (ACMB/BMZA) y el Hospital San Juan de Dios de Santurtzi han rubricado un convenio de colaboración para el desarrollo de distintas actividades formativas y divulgativas en el ámbito de la promoción de la salud que organicen ambas entidades. El documento fue firmado por Agurtzane Ortiz, presidenta de la ACMB/BMZA, y Vicente Fernández Zurita, director-gerente del Hospital.
El acto de la firma se llevó a cabo en la inauguración de la Jornada de Cuidados Paliativos desde el modelo asistencial de San Juan de Dios, actividad incluida en el programa anual de actos del centenario del Hospital San Juan de Dios de Santurtzi, y que reunió a más de 300 asistentes en el auditorio Centenario de la Universidad de Deusto, en Bilbao.
El objeto del acuerdo es la colaboración por parte del Hospital San Juan de Dios de Santurtzi y la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao en el desarrollo de distintas actividades formativas y divulgativas que organice la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao, y que se detallarán de manera individual mediante el establecimiento de anexos específicos al acuerdo de colaboración.
Los contenidos de las actividades formativas del convenio firmado por ambas entidades se encuadran principalmente en el área de asistencia sanitaria o salud pública. No obstante, podrán ampliarse a cualquier otra relacionada con la asistencia sanitaria o la salud pública que se acuerde.
Vicente Fernández Zurita mostró su alegría tras la firma del convenio debido, según dijo, a que «vincula a dos entidades centenarias y que, cada una en su ámbito, gozan de un gran prestigio social y profesional». Tal y como aseveró, «ambos, Academia y Hospital, hemos contado a lo largo de nuestra trayectoria —y contamos hoy—, con la confianza de las administraciones públicas, en una colaboración constante para favorecer la salud de la población de Bizkaia. Ésta es, ni más ni menos, nuestra razón de ser e, igualmente, el objetivo final de este convenio».
Por su parte Agurtzane Ortiz, que también participó en la jornada de cuidados paliativos como ponente, en su condición de profesora de Neurociencias de la Universidad del País Vasco, destacó que «nuestras dos instituciones nacieron hace más de cien años gracias al empeño de varias personas destacadas que tenían clara la necesidad de mejorar la salud y las condiciones de vida de la población de Bizkaia. Fruto de ese gran empuje, y herederos de ese esfuerzo, hoy mantenemos vivo ese espíritu de servicio público y de formación para la excelencia de los profesionales sanitarios».
La Academia de Ciencias Médicas de Bilbao fue fundada en 1895. Durante sus más de 125 años de historia ha desarrollado una importante labor sanitaria y social que articula a través de sus distintas secciones académicas. Desde el principio, se definió como una institución libre y pluridisciplinar compuesta por profesionales de la Medicina, Farmacia, Biología, Odontología y Veterinaria, creando su propio órgano de expresión la Gaceta Médica de Bilbao. Esta publicación es la revista científica oficial de la Academia y es la decana de las revistas biosanitarias de España. Desde 2012 se edita de manera digital y cuenta con su propio portal web, en el que se ofrece la revista de manera libre y gratuita. Su dirección en Internet es: www.gacetamedicabilbao.eus.
El Hospital San Juan de Dios de Santurtzi, fundado en 1924 por la Fundación Benéfica Aguirre, es un hospital médico-quirúrgico, sin ánimo de lucro, gestionado por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios y promovido bajo sus principios y valores. Realiza una variada actividad de consultas, diagnóstica, quirúrgica y de hospitalización, para la que dispone de los más modernos medios tecnológicos, profesionales y estructurales.
Ofrece una atención humanizada, cercana e integral desde el diagnóstico, tratamiento, cuidado y rehabilitación al paciente, tanto agudo como crónico, en fases avanzadas de su enfermedad y al final de la vida, tanto en régimen de hospitalización como a domicilio. Todo ello, con el fin de lograr su curación, aliviar su dolor y lograr su bienestar, y gracias a la implicación de un equipo humano integrado y responsable.
Presta servicios sanitarios, mayoritariamente, a la población de su área de influencia (Margen Izquierda, Margen Derecha, Zona Minera y Gran Bilbao) a través de los acuerdos con el Departamento de Salud del Gobierno Vasco, Diputación Foral de Bizkaia, con compañías aseguradoras y mutuas de accidente de trabajo y enfermedades profesionales y, del mismo modo, al paciente privado.